Hola Roberto, el primer principio no está puesto a prueba en el caso Godoy. Nadie lo priva del derecho a usar internet ni se le sentencia a no usarla (tipo superhacker). Tampoco se prohibe el uso de la herramienta (el blog) ni se ordena el cierre de la página en concreto (DTP).
El caso Godoy pone a prueba el tercer principio, el derecho a tener una internet segura y confiable donde, y cito, “los proveedores de contenido y de acceso a todo nivel, están comprometidos en crear un entorno digital seguro, en lucha permanente contra la discriminación, el abuso sexual y moral, el tráfico de personas y en general toda actividad criminal”.
Siendo la difamación un delito, la sanción judicial a ésta se enmarca en la realización de este principio y proscribe esta actividad criminal dentro de la red.
Esto más allá de que nos guste o no la sentencia. Mi opinión personal y mis observaciones a la misma ya las hice en otros blogs (Blawyer y Mil Demonios) y las pondría acá pero después de ver tu respuesta a Luis Aguirre y la censura sistemática de OCRAM, sólo la haría a invitación tuya.